El horror de los gastos “chupasangre”: cómo mantener a raya los monstruos financieros en tu pyme
El impacto de estos gastos descontrolados es digno de una historia de miedo, pues el 22% de los negocios en crecimiento en México identifica la falta de gestión y control de presupuestos como su principal debilidad.
La tecnología se convierte en el antídoto perfecto para estos problemas, ya que permite automatizar procesos, mejorar la visibilidad y optimizar los recursos, asegurando que ningún mal pase desapercibido.
Con Halloween cerca, los “gastos chupasangre” acechan la gestión financiera de las pequeñas y medianas empresas (pymes) y drenan sus recursos de forma silenciosa. Como vampiros invisibles, estos costos innecesarios se infiltran en el presupuesto, generan pérdidas y provocan complicaciones que pueden convertir el cierre de año en una verdadera pesadilla.
El impacto de estos gastos no controlados son auténticas leyendas de terror. De acuerdo con datos oficiales, para el 22% de las pymes un aspecto a mejorar es la administración y el control de presupuestos, motivo que se posiciona en el top de su fracaso; por su parte, el 33% tiene atrasados pagos de facturas.
Para Pablo Andrés Rivera, Managing Director de Pay América en Edenred México, “los negocios en crecimiento pierden grandes oportunidades de ahorro al no detectar a tiempo estos pequeños monstruos financieros que drenan sus recursos. Para evitarlo, las pymes deben contar con herramientas tecnológicas que les permitan visibilizar y controlar cada movimiento con el objetivo de optimizar el uso de sus recursos y asegurar una correcta la deducción de sus gastos.”
Con esto en mente, el experto comparte tres sencillos consejos para mantener a raya a los llamados “gastos chupasangre” en este Halloween 2024:
1. El robo hormiga por todos tan temido
Este tipo de hurto es como un duendecillo travieso que sale de las tinieblas y se lleva pequeñas cosas sin que nadie lo note. Al principio, parecen pérdidas insignificantes, como material de oficina o productos del inventario; pero, con el tiempo, esos pequeños desfalcos se acumulan y provocan un agujero, convirtiéndose en un problema mayor que, al final del año, deja un impacto considerable en las finanzas.
Para frenar al “robo hormiga” en una pyme, nada mejor que una estrategia que ilumine las sombras. Digitalizar los pagos con tarjetas empresariales es como encender una linterna en medio de la noche: permite rastrear cada gasto y detectar rápidamente cualquier anomalía. Así se establecen límites y se controlan los movimientos, lo que evita que esos terribles duendes se lleven recursos sin ser vistos.
2. Fantasmas en los proveedores
Una mala organización en los pagos a proveedores puede convertirse en un problema que acecha como un fantasma en la oscuridad, y que puede afectar la relación y la rentabilidad del negocio. Los retrasos o términos poco claros pueden convertirse en sustos financieros que crean miedos innecesarios.
Para ahuyentar estos “fantasmas”, el uso de tarjetas empresariales ofrece eficiencia y comodidad al pagar a los proveedores. Estas soluciones digitalizan las transacciones, fortalecen las relaciones comerciales y optimizan la gestión financiera. Estas soluciones permiten un control más preciso y, lo más importante, mantienen las finanzas a salvo de sorpresas escalofriantes.
3. El hombre invisible de la deducción de impuestos
Aprovechar las deducciones fiscales mejora el flujo de caja, pero a veces este beneficio se vuelve tan invisible como un espíritu chocarrero, debido a la falta de comprobación adecuada de gastos. Sin un control preciso, esos ahorros que podrían aliviar las finanzas desaparecen sin dejar rastro, como espectro en la noche.
Para evitar que las deducciones fiscales se desvanezcan, las pymes pueden automatizar la comprobación y deducción de gastos mediante herramientas que gestionan cada transacción con su respectiva factura. Esto garantiza que todos los gastos deducibles se reporten correctamente, permitiendo a las empresas maximizar sus beneficios fiscales y evitar que esos ahorros “brillen por su ausencia”.
En conclusión, enfrentar el horror de los gastos “chupasangre” y mantener a raya los monstruos financieros en las pymes requiere de estrategia y visión. Adoptar herramientas tecnológicas y mejorar la gestión de gastos y deducciones permite transformar debilidades en oportunidades de ahorro. Dejar atrás el miedo a innovar es clave para asegurar un futuro sólido, donde los emprendimientos no solo superen la temporada de sustos, sino que avancen con fuerza hacia el éxito.