La responsabilidad social implica tecnología, buenas finanzas y un buen manejo del capital humano
Digitalizar la contabilidad y la nómina de una empresa son algunos de los primeros pasos para ganarse la confianza de nuevos inversores
Ciudad de México, 26 de noviembre de 2024.- Existe una verdad irremediable entre los empresarios: los negocios implican riesgo e innovación constante. Aunque no den frutos inmediatos, estos factores pueden marcar la diferencia entre que un proyecto fracase, o que triunfe y crezca inconmensurablemente.
Probablemente, el gran reto de las empresas de esta naturaleza sea ser socialmente responsables, sobre todo porque, a largo plazo, representa una inversión importante, pero también representa muchos beneficios para los emprendedores en términos de alianzas estratégicas y bonificaciones fiscales.
Sin embargo, estas prácticas, que van desde implementar energía sustentable hasta tener políticas laborales sanas, requieren tecnología y una férrea disciplina relacionada con la administración de la empresa, en particular con su capital.
¿A qué nos referimos con esto? A que no basta con invertir en tecnologías verdes para hacer una empresa atractiva. Esto debe combinarse con finanzas sólidas y una administración eficiente de los recursos internos, lo que permita financiar otros tipos de proyectos, como la aplicación de energías alternativas y formas de producción sustentables, al mismo tiempo que el negocio crece, se expande e incluso se internacionaliza.
El primer paso probablemente sea la digitalización en aspectos como la contabilidad y los recursos humanos. En el primer caso, se puede recurrir a un software como COI de Siigo Aspel, que permite organizar las finanzas de la empresa de manera precisa, generando facturas y reportes, catalogar inventarios, y manteniendo a la organización actualizada con las reglamentaciones más estrictas del Sistema de Administración Tributaria (SAT).
Esta infraestructura facilitará la obtención de incentivos fiscales por actividades a favor del medio ambiente, como los que ya ofrece la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, al mismo tiempo que hace más atractiva a la empresa para negocios extranjeros que buscan alianzas con empresas responsables, que cuenten con políticas a favor del medio ambiente y contra el cambio climático.
En cuanto al capital humano, un software como NOI de Siigo Aspel puede ayudar a empresas de servicios, comercio e industrias para que administren eficientemente la información de sus colaboradores; con él también pueden procesar la nómina de forma sencilla y sin errores, además de resguardar la información y mantenerla sin modificaciones. También agiliza el registro de incidencias y consultas a través de una aplicación móvil, lo que facilita la operatividad de cualquier empresa que cuente con una plantilla de personal en crecimiento.
Controlar la nómina, junto con las prestaciones y servicios de ley necesarios para los trabajadores generará un ambiente responsable que, a largo plazo, otorgará al negocio una reputación progresista y deseable, no solo para atraer talento, sino también para captar a personas que buscan impulsar políticas responsables en el competitivo mundo empresarial.
De esta manera, la digitalización, el capital humano y la responsabilidad social están unidas por un solo hilo conductor: el avance y desarrollo de la empresa hacia la modernidad y la adopción de mejores prácticas que, poco a poco, se extienden entre las empresas mexicanas.